La pandemia del COVID-19 no concede tregua a la violencia en contra de las mujeres. Por citar un ejemplo, de acuerdo a Angélica Ayala Ortiz, Presidenta del Grupo de estudios sobre la mujer “Rosario Castellanos” (GESMujer), en lo va de la administración de Alejandro Murat, se ha registrado un aumento de muertes violentas de mujeres en el Estado de Oaxaca. (Proceso, 29 de mayo, 2020).
La violencia en contra de las mujeres no es endémica de una entidad federativa, la semana pasada, en plena cuarentena; a través de la cuenta de Twitter @emariana74, se difundió un video en el que se observó al Notario 102 del Estado de México, Horacio Aguilar Álvarez de Alba, maltratando físicamente a su esposa en plena vía pública.
La víctima del maltrato físico, solicitó ayuda a quienes observaban los hechos, pero cuando Aguilar Álvarez de Alba expresó que es su esposa, no intervinieron, ¿Qué les parece?, los testigos de este ataque, al enterarse que el agresor es consorte de la agredida, concluyeron que posee el derecho de actuar de esa forma. Todas y todos, nos volvemos cómplices al ser indiferentes, somos una ciudadanía omisa. Sin embargo, las acusaciones hacia el Notario no se limitan al video viralizado en redes sociales; también cuenta con acusaciones como probable responsable de los delitos de violación, abuso y acoso sexual. Los señalamientos provienen de estudiantes universitarias de la Escuela Libre de Derecho (ELD), que durante varios años, denunciaron los hechos ante las autoridades académicas de esta institución educativa.
El pasado 15 de mayo, en este mismo portal de noticias: FDN Oaxaca, publiqué una columna respecto al poder arbitrario que puede llegar a tener las y los docentes al interior de las aulas. Desafortunadamente, existe profesionistas que al no tener la vocación de enseñar, llegan a las instituciones educativas “haber que encuentran”, desplegando conductas y ejemplos nocivos para el estudiantado.
Una de esas conductas delictivas son los delitos sexuales que se cometen al interior o fuera de las escuelas. Antes de la pandemia del coronavirus, en Oaxaca, se suscitó un escándalo en los COBAOS, por presuntos acosos y abusos sexuales en contra de menores de edad, sin duda muy grave.
En las universidades estas conductas son más comunes, existen acusaciones en contra de docentes que son calificados como depredadores sexuales, empero, aumenta la peligrosidad cuando este tipo de personas, se encuentran al frente de puestos directivos, tanto en instituciones públicas como privadas.
Por ello, resulta necesario que las instituciones educativas cuenten con procedimientos y protocolos en la selección docente, además de ayudar al estudiantado, que desafortunadamente; se encuentran con este tipo de pseudo-profesores a lo largo de su instrucción universitaria. A pesar que el nombre del Notario fue exhibido en el “tendedero” de la ELD, donde se le denuncia como acosador y abusador sexual, siendo viralizado en redes sociales; desafortunadamente no es suficiente. Es prioritaria una denuncia formal ante las autoridades competentes, por lo que si eres víctima de cualquier delito, acude ante las instancias estatales correspondientes.
También exhortamos que las madres y padres de familia estén al pendiente de la educación que están recibiendo sus descendientes, verificar el perfil de los docentes, porque siempre hay signos visibles que alertan este tipo de conductas.
Vuelvo a ser reiterativo, como humanidad, la congruencia sigue faltando en nuestro perfil público y privado: verbigracia, la ética en la docencia, debe estar presente en el servicio público, en el interior de nuestro hogar, etcétera. ¿Se imaginan a Aguilar Álvarez de Alba impartir clase sobre los fundamentos del Derecho Familiar o Ética Jurídica? Nadie puede enseñar lo que no tiene.
Al final de todo el revuelo, el Notario Público, mediante un tuit, expresó sus disculpas, en las cuales menciona a su esposa, a los demás notarios, a las autoridades administrativas, vaya pues; hasta Alfredo del Mazo Maza, Gobernador del Estado de México. También manifestó “seguir dialogando con el fin de resolver las diferencias…” Si así dialoga, posiblemente lo veamos en algún otro escándalo. Sabemos de Aguilar Álvarez de Alba, gracias a las “benditas” o “malditas” redes sociales; pero ¿cuántos casos más, como las acusaciones en la ELD, se encuentran en el anonimato?
¿Se ha topado en la vida con este tipo de Notario Público, docente universitario, vecino, conductor, abogado, servidor público…? Le aseguro que sí. Al final, Usted, tiene la mejor opinión…
Julio Eduardo Manzano Bizuet Ex Defensor de las Audiencias de la CORTV. Es licenciado en Derecho, maestro en Ciencias de la Educación por el Instituto de Estudios Universitarios (IEU), maestro en Derecho Constitucional y Administrativo por la Universidad Lasalle, plantel Oaxaca. Docente actualmente de instituciones de los niveles medio superior y superior. Twitter: @EduardoBizuet
