Julio Eduardo Manzano Bizuet*
Y, ¿si Flaubert y Baudelaire vivieran en el siglo XXI?
Oaxaca de Juárez, Oax. 25 de abril de 2023.- ¿Cuántos libros ha leído en lo que va del 2023? ¿Cuántos libros leyó durante el 2022? ¿Cuántos libros lee una persona que vive en México? Se lo comento porque el pasado domingo 23 de abril, se celebró el Día Internacional del Libro y los Derechos de Autor; empero, por lo menos en la República Mexicana no hay mucho que celebrar respecto al porcentaje de personas que leen. De acuerdo con el INEGI, durante el 2022 hubo una disminución de lectura, pasó de 3.8 libros a 3.4 en promedio.
En el marco de este día, con el afán de contribuir al hábito lector, en mis redes sociodigitales recomendé el libro: “El origen del narrador Actas completas de los juicios de Flaubert y Baudelaire”, editado por Mardulce; este ensayo describe los procesos judiciales a los que fueron sometidos: Gustavo Flaubert y Charles Baudelaire, el primero por escribir “Madame Bovary”, y el segundo por “Las flores del mal”.
Los escritores e impresores de ambos textos también fueron sometidos al proceso judicial. La acusación la realizó el Fiscal imperial Ernest Pinard; mientras que la defensa de Flaubert corrió a cargo de Monsieur Sénard y de Baudelaire la llevó cabo Monsieur Gustave Chaix D’est Ange.
Otro dato importante que rescato del libro en mención son los argumentos que plantean, tanto los abogadores de ambos escritores, como de la imputación que realiza el Fiscal Imperial.
Por lo que respecta a la novela intitulada “Madame Bovary”, se le acusó a Flaubert que su obra incitaba al adulterio, a las más bajas pasiones; en pocas palabras, es un mal ejemplo para las mujeres que se atrevieran a leer aquellas líneas.
La defensa jurídica del abogado de Flaubert se basó en qué, si bien es cierto describe un adulterio, también señala las tribulaciones, aflicciones y consecuencias que pueden traer consigo un adulterio.
El abogado Monsieur Sénard logró que el jurado absolviera a Flaubert, a los impresores y editores del libro Madame Bovary. En caso que la sentencia hubiera sido condenatoria, no se castigaba con la pena de muerte, pero sí con multa y “mutilación” de los parágrafos ignominiosos.
Quienes sí fueron sentenciados al pago de una multa fueron los impresores, editores y el escritor Charles Baudelaire por el libro “Las flores del mal”, porque atentaban contra la moral de aquella época.
Como ejemplo transcribiré un párrafo de “Las flores del mal” que es considerado como una ofensa a la moral pública:
“Y su brazo y su pierna y su muslo y sus caderas,
Tersos como el aceite, ondulantes como un cisne,
Pasaban ante mis ojos clarividentes y serenos;
Y su vientre y sus pechos, racismos de mi viña”
Cabe señalar que los dos abogadores defensores dentro de sus argumentos expresaron que existían otras obras o publicaciones, incluso con líneas con mayor afrenta pública, cuyos autores no fueron llevados a juicio.
¿Se imaginan que dirían estas personas que vivieron en el siglo XIX si escucharan la letra de las canciones que están de moda entre la juventud hoy en día? Cada época tiene un contexto, lo que ayer escandalizaba a una determinada sociedad, puede ser que hoy no sea escandaloso; esto variará de acuerdo con los valores y moral de la época.
Actualmente, esta moralina ha sucumbido ante la libertad de expresión; empero aún existen reminiscencias del pasado que intentan censurar, castigar, sentenciar a autores y libros. En México hemos tenido ejemplos, como cuando a principios del siglo XXI, un Secretario de Estado prohibió la lectura del libro “Aura” de Carlos Fuentes por considerarlo inmoral.
Esperemos no se repitan aquellos tiempos donde quien detenta el poder político determine qué o qué no se debe leer, porque así como existe la libre expresión para escribir, también existe el derecho a leer, o en su caso, a no leer.
Al final, usted, tiene la mejor opinión…
* Maestro en Derecho Constitucional. Ex Defensor de las Audiencias de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión. Docente.